lunes, 7 de diciembre de 2009

MIENTRAS ESPERO EL TREN...

Hola a todos, llega diciembre y con el mes el recuento, los balances, el pan dulce, las balanzas y dulce que te quiero dulce.

Si bien mis relatos fueron escuetos, a tientas un par de ellos, en esta oportunidad y junto con el cierre del año no podía no comunicarme y contarles que soy feliz, que salió el sol y se quedó frente a mi ventana.

Salió y me lo tomé todo, cuándo voy a aprender a poner el protector en la cartera, a mis treinta y pico y sin pico tendría que tener más que incorporado el llevar todo tipo de protección en mi bolso de Mary Poppins.

Como pueden ver, sigo con mi falta de articulación con mí amigo personal, el clima. Desde el sur y con tiempo loco, llueve, nieva y sale el sol, y cuando sale el sol al mejor estilo Buenos Aires nos ponemos los cortos y mostramos las piernas.

A los costos fijos de peluquería se le suma el de depilación y todos los anexos que ello conlleva. Y vuelvo a reafirmar la frase, “una cerveza?! naaaaaa!!”.

Es una de mis características irme por las ramas, y ahora que anda suelto puede ser que pegue candidato uruguayo?!, descartado, lo mío son los pebetes (y no precisamente los de jamón y queso).

Las divas somos así, tan solicitadas que no damos a basto con las citas. Con lo cual que empiecen a hacer cola, porque estoy más linda que nunca, y aún no me vieron maquillada, jajaja.

Cierre de año, apertura de mente, de corazón y un brindis por el amor y por las pequeñas y grandes cosas que nos alegran la vida.

Les conté que empecé folklore?, sí… pasé por hip hop, reggaeton y actualmente ando revoleando el pañuelo celeste. Es una danza de gatos, pícaros y románticos, cantos que te llegan al alma y al corazón.

Hay que transitar varios caminos y mientras espero que pase el tren, voy de andén en andén. En una oportunidad mi gran amiga Sebas me dijo “el tren pasa dos veces, una de ida y otra de vuelta”. Hay que estar alerta porque la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida.

De política mejor ni hablar, este año opté por no hacer relevamiento de noticias, evidentemente el taparme las canas anuló la parte comprometida, inductiva y deductiva que supe desarrollar por mi paso por el CAI, rodeada de tanto ingeniero, de tanta seriedad y contacto con la realidad política-económica y residual.

Migré, pasé de andén o como quieran o puedan llamarle. Esta frase de reinventarse está a flor de piel, y cual PYME para sobrevivir en este mercado, muté, me agiorné.

Luego de mi paso por la gastronomía, que me vino como cuchara al plato, como pincho a la brochote, el sol trajo nuevos rayos, nuevos horizontes, nuevos brillos, marketing y turismo, la chancha y los veinte, les conté que fui nodriza de diez chanchitos? (esa es otra historia de mi faceta campo).

Doy gracias, gracias, gracias totales!. Feliz año!, salud, dinero y amor… y mucho sol, que brille, que nos haga brillar.

Besos,