lunes, 28 de julio de 2008

LE PEGUE EN EL CAÑO...

Lunes, otra semana comienza en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en el resto del país y del mundo.

Mi ausencia en el teclado fue motivada (valga la redundancia) por la falta de motivación y una carga de trabajo extra. Hace mucho, muchísimo que no me quedaba trabajando hasta altas horas de la noche, pero me tocó quedarme y trabajé de corrido y eso me alteró mi conducta rutinaria, jajaja.

Es impresionante como uno pierde esa gimnasia que hace el nexo entre lo diurno y lo nocturno acompañado de lo intelectual y laboral... en mi caso perdí esa gimnasia y toda gimnasia en su término denotativo y connotavido, literal y metafórico.

Entre el trabajo extra, y un sorpresivo incidente en el baño, nuevamente mi baño, esta vez no fue el caño de la calefacción (aún no han venido a tapar el hueco que dejaron en el arreglo), sino que en esta oportunidad... el protagonista... mejor dicho la protagonista fue la rejilla.

Me encontraba respondiendo un pedido de mi jefe que al unísono de 'auxilio, me dejaron solo y no entiendo cómo copiar el formato en el word', cuando escucho... la pu.. lo mismo que le pasó a Paula... salto del sillón de la compu (porque como tuve que trasnochar me quedé trabajando desde casa) y me dirijo al pasillo que comunica los dormitorios... lo que pensaba, se inundó el departamento.

Créase o no... se tapó la rejilla y como consecuencia trajo consigo agua, mucha agua que se esparcía por todo el parquet, los cuartos, el pasillo y no dejaba de brotar, a todo esto mi hermano en toalla tratando de salir sin caer en un 'patinando por un sueño', veníamos del 'baile del caño' y estábamos a punto de innovar en el 'nadando'.

Tenía que corregir el archivo, zipearlo y enviárselo a mi jefe y no había 'premio remo' que colaborara en la tarea de evacuación. Cuando nos veíamos protagonizando 'lo que el agua se llevó', empezó a bajar el nivel y Juanpi con la ayuda del secador (de agua no de pelo) pudo escurrir el agua hacia la rejilla.

Secamos el parquet, mi jefe al teléfono que me decía 'poné un ventilador invertido y eso va a colaborar con la tarea de secado', llamamos a la administración y solicitamos al destapador.

Dicho personaje no se hizo presente, es el ABC de las administradoras, les importa un bledo que estés con la rejilla tapada. El agua bajó como el raiting de Tinelli y era hora de poner un destape, así que seguimos insistiendo y hoy cantamos bingo, vino el señor destapador.

La vida misma, estamos en un reality, y como nos han enseñado en la carrera de comunicación social... todos los formatos se repiten, no sé en que estaba pensando, era obvio que después del caño venía el destape.

Y después de éstos... el patinando... venía en el Chevallier desde Campana y cuando llegamos a Cabildo y Congreso no va que una señora mayor se levanta y con intenciones de adelantarse (pues se bajaba en la última parada) hace un par de pasos y patinó... se fué contra el parabrisas y de ahí no paró hasta el último escalón del colectivo.

Del susto me contracturé toda, me imagino la señora... muy feo, tuvimos que parar en emergencias, le tomaron la presión y pidieron una ambulancia para llevarla desde Once hasta el hospital más cercano, el chofer temblaba, era el mismo mala onda que no nos quiso subir en aquella oportunidad que mi hermano no tenía el pasaje y sí las monedas...

Pueden creer que su pregunta para con la señora fue... 'si no había parada, para qué se levantó??', después cayó en la cuenta y se preocupó por la salud de la señora. En ciertas oportunidades uno actúa por acción - reacción, y no mide sus palabras... este fue el caso del chofer.

Del chofer y de muchos que nos vamos de boca, como Vianchi, me hago cargo mi lengua va más rápido que mi entendimiento, no soy rubia pero le pego en el palo, mejor dicho... en el caño... nuevamente el caño... y pensando... pensando... será que después del caño, del destape y del patinando... no me llegará el efecto botinera?!?!?!.

Si es así, cambió botín de fútbol por un par de rugby... y nuevamente JMH. Destino... Alcoyana Alcoyana... Capri Capri... Casualidad... o simplemente... Divagando por un Sueño.

Besos

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